Autoexploración de nuestra salud mental

Por Lic. en Psicología Maritza González

Desarrollar y potenciar la autoexploración de nuestra salud mental es una poderosa herramienta para gestionar y regular nuestras emociones, lo que puede influir en nuestro bienestar. ¿Es posible llegar a conocerse a uno mismo a plenitud?, ¿podemos identificar aquellas pautas que nos mueven? ¿Quién eres? ¿Qué te impulsa? ¿Qué te motiva? ¿Qué necesitas para estar bien?

De seguro son preguntas de las que no necesariamente tenemos respuestas certeras, no hay de qué preocuparse, las respuestas a este tipo de cuestionamientos se descubren con el tiempo y a menudo se requiere espacios donde se dé lugar a la reflexión profunda, de manera individual o con un profesional.

Puede ser difícil y a veces muy complejo encontrar tiempo de calidad para el ejercicio de la introspección en nuestras muy apretadas agendas, pero profundizar en nuestra autocomprensión puede traer paz y sentido a nuestras vidas. Comenzar un viaje de autoexploración en terapia o por cuenta propia es siempre una alternativa viable.
La autoexploración es la práctica de explorar los pensamientos, sentimientos, emociones y comportamiento que nos acompañan. Puede ayudar a aumentar nuestra autoconciencia, que es la capacidad de autoevaluarnos y reconocer cómo ocupamos el tiempo y el espacio desde nuestra realidad. La autoconciencia puede permitirnos profundizar nuestra comprensión de nuestros desencadenantes emocionales, sensibilidades y, por tanto, mejorar nuestras prácticas de cuidado personal. Esto puede conducir a una regulación emocional más eficiente y empática.

Una vez que comprenda por qué se siente cómo se siente, también podrá comunicar mejor sus necesidades y sentimientos a los demás, lo que puede fortalecer las relaciones y ayudarlo a preservar mejores límites. ¿Qué notaste sobre ti esta semana? Cada pensamiento, interacción o experiencia puede ser una oportunidad para el autoexamen.
No tienes que sentarte a pensar en silencio para practicar la autoexploración. Hay muchas formas de ampliar tu autoconocimiento que son activas. Estas actividades incluyen:
*escribir tus memorias,
*redactar una carta para una cápsula del tiempo,
*escribir tu propio obituario,
*crear un árbol genealógico,
*reflexionar sobre tus mejores y peores días,
*empezar un diario de sueños,
*iniciar un diario personal,
*solicitar la ayuda de otros, como un amigo, mentor, consejero espiritual o terapeuta.

Una forma de conocernos es preguntarse, sostener conversaciones internas o frente al espejo: «¿Y por qué …?» más a menudo. Puede comenzar con elecciones y decisiones cotidianas, como por ejemplo: «¿Por qué tengo que lavar los baños todos los días?» o tan simple como: «¿Por qué una ducha en lugar de un baño?». Amplíe gradualmente el alcance de sus preguntas y verá resultados positivos.

Si eso no le atrae, puede considerar algunas de las siguientes preguntas:
*¿Qué es lo que más te gusta de ti?
*¿Qué es algo que siempre ha sido importante para ti y por qué?
*¿Qué te hace sentir amado?
*¿Qué te hace llorar?
*¿Qué es lo que más te gusta hacer?
*¿A qué sueños de la infancia te aferras todavía y qué has dejado ir?
*¿Cómo quieres que te vean los demás?
*¿Qué tipos de cuidado personal funcionan mejor para ti?
*¿Dónde está tu espacio seguro?

La autoexploración es la práctica de examinar tus propios pensamientos, sentimientos, valores, creencias, identidad, antecedentes, puntos de vista y emociones, con el propósito de comprenderte mejor a ti mismo, mejorando la autoconciencia, la autoestima, la comunicación, la empatía, la autorregulación emocional y, por tanto, la salud mental.

1 comentario

teresa Rotundo 11.11.2023

Buenos dias. GENIAL¡¡¡

Respuesta de Amec 13.11.2023

¡Muchas gracias, Teresa! Un saludo.

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